LA IMPORTANCIA DE LA COMUNICACIÓN Y ENTENDIMIENTO ENTRE PADRES E HIJOS

Lo primero ante todo quiero deciros que tengo tres hijos, cada uno de una edad totalmente distinta...24 años,14 y la peque de 5 años. Yo no me considero una madre perfecta, eso quiero dejarlo claro, mis hijos tampoco lo son, en realidad no existe la perfección en una persona, cada uno tenemos nuestro carácter y puede o no gustar al resto, pero es ley de vida.Os podéis imaginar cada vez que hablo con uno de ellos el cambio de "chip" que tengo que realizar, no es lo mismo hablar con mi hijo de 24 que con mi hija de 5, es difícil a veces...de ahí que digan que es mejor tener los hijos seguidos o como mucho que se lleven 2 años entre ellos, así sería mas fácil y llevadero.

El motivo de escribir este documento me lo ha provocado la adolescencia que está viviendo mi hija de 14 años y la que vivió mi hijo que ahora tiene 24...la pequeña de momento es palomita suelta!!

La relación que tengo con mis hijos es de madre, pero a la misma vez de "amiga", mi hijos tienen la confianza suficiente para contarme los problemas que les pueda surgir, también los buenos momentos que viven y las trastadas que pueden llegar a cometer...que las hay!!

Tanto mi hijo mayor como su hermana de 14 años, siempre se han traído a los amigos a casa, reconozco que hay veces que me molesta y les pregunto el por qué siempre en mi casa, ellos me contestan, ¡¡ porque las madres de mis amigos no quieren que estemos en su casa porque molestan!!...ante esa contestación, qué hago?? prefiero mil veces tenerlos en casa que sé lo que están haciendo, oigo lo que están hablando e incluso me piden opinión, a que estén dios sabe dónde y haciendo quién sabe qué...me encanta oír sus risas!!

Cuando los hijos llegan a la adolescencia se quieren sentir integrados en los problemas y alegrías de casa, quieren que les contemos todo, y se preocupan cuando ven malas caras de sus padres...yo intento hablar con ellos de la mejor manera posible para que entiendan,creo que eso les da la confianza suficiente para contarme ellos a mí sus experiencias tanto buenas como malas. Reconozco que hay veces que cuando alguno de mis hijos me cuenta algo que no han hecho bien, me tengo que morder los puños para no ponerles mala cara y empezar a gritarles, pero también sé que dependiendo de mi reacción, la próxima vez me contarán o no...yo personalmente prefiero saber lo que está pasando porque me lo cuentan ellos, a que me lo cuenten fuera, de esta manera puedo aconsejarles lo mejor que pueden hacer, según mi punto de vista, y que no se vayan guiando por lo que les dicen fuera de casa, que en unos casos puede ser bueno, pero en la mayoría de los casos la adolescencia es muy ignorante y ello les hace valientes, entonces pasan cosas no demasiado buenas ni para ellos ni para nosotros,los padres, ahí viene el sufrimiento por las dos partes.

Mis hijos no son los mejores estudiantes, ni los más ordenados, pero de lo que sí me siento muy orgullosa es de haberles hecho entender que la educación y el respeto está por encima de todo, y creo que lo he conseguido, aún me queda mucho, puesto que a los 14 años es cuando empiezan a tener las experiencias que más preocupan a los padres, en ocasiones peligrosas, pero creo que nadie va a venir a casa a decirme que mis hijos han faltado el respeto a alguien o que tengo unos hijos maleducados, cosa que está a la orden del día en muchos adolescentes, se está perdiendo el respeto hacia los padres y en general a cualquier persona que no tenga su misma opinión.

Cuando tienes comunicación con tus hijos y los haces partícipes en las dudas que puedas llegar a tener, ellos se sienten importantes en el núcleo familiar, dan sus ideas para resolver y se dan cuenta que la familia está para apoyarse unos a otros, de ahí que ellos también vengan a contarte sus vivencias para poder resolverlas con su familia, que al fin y al cabo somos los que mas nos preocupamos por ellos y los que de verdad los ayudarán a resolver sus "problemas" sin condiciones ningunas...para ello somos sus PADRES.